El portavoz del Grupo Socialista en la Diputación de Burgos, José María Jiménez, insta al presidente de la Institución provincial, César Rico, a apostar por el diálogo y el consenso, en lugar de la imposición, en su reunión de esta tarde con los trabajadores de las residencias de mayores que dependen de esta Institución.
Jiménez opina que en este encuentro, que abordará la aplicación del incremento de la jornada a 37,5 horas para estos empleados, el equipo de Gobierno ha de adoptar una postura “flexible y receptiva”.
El portavoz socialista asegura que el personal que trabaja en estos centros “ya ha recibido suficiente castigo con las medidas que aprobó el Gobierno, como la supresión de la paga extraordinaria de Navidad” y que la Institución provincial ha de ser sensible a sus necesidades “por el bien del servicio que prestan”.
“Estoy seguro de que, como los trabajadores, el presidente de la Diputación no quiere que se produzca un deterioro de la calidad asistencial de las residencias y son ellos quienes mejor conocen esta realidad”, advierte Jiménez.
Los empleados de las residencias solicitan poder cumplir el incremento de 2,5 horas semanales con 30 minutos de trabajo más cada día, en lugar de distribuirlo en jornadas completas, que significarían unos 14 días más al año. Una posibilidad a la que, según el PSOE, “el PP no debe cerrarse en banda”.
“La Diputación ha de ser especialmente sensible en esta negociación y escuchar a los trabajadores, que ya disponen de unos medios muy ajustados para desempeñar sus funciones, porque está en juego la calidad de un servicio público”, concluye.





